El té que tiene más antioxidantes
El té es una de las bebidas más consumidas en todo el mundo, no solo por su saber sino también por los beneficios que tiene. Desde mejorar el estado de cualquier persona cuando se siente engripada hasta prevenir la aparición de arrugas en la piel.
Una de las variedades que más propiedades antioxidantes tiene es el té blanco, una infusión delicada y de exquisito sabor con más de 5000 años de historia.
Una de las principales cualidades de esta bebida natural es que es muy beneficiosa para la salud, siendo la infusión con más antioxidantes que se dispone en la actualidad.
El mitológico origen del té blanco
El té blanco es la infusión menos procesada y tiene niveles antioxidantes más elevados en comparación con otros tipos, como el té negro o el verde.
Esta infusión procede de la planta Camellia Sinensis. Su origen data de hace más de 5000 años en China y surgió luego de que el emperador Shen Nung sintiera sed mientras daba un paseo y comenzó a hervir agua en una olla. Como arte de magia, unas hojas de té blanco cayeron en el agua caliente, dando origen a una bebida prodigiosa, que no sólo calmó la sed del emperador, sino que alivió su malestar.
Los increíbles beneficios de tomar té blanco por la mañana
Según los especialistas nutricionales es conveniente tomar el té blanco a diario, aunque se resalta sus propiedades benéficas a primera hora de la mañana, que es cuando el organismo es más receptivo y se pueden aprovechar aún más sus virtudes antiarrugas.
Esta infusión aporta catequinas, un importante antioxidante para el organismo y en los últimos años supo estar relacionado con protección frente a enfermedades como la diabetes y patologías cardiovasculares.
Té blanco en el desayuno: su imperdible poder antiarrugas
Tomar té blanco mejora la salud de todo el organismo, hace lucir la piel y evita la aparición de arrugas en el rostro y otras partes del cuerpo.
- Es un gran agente natural que propicia y cuida las células de la piel.
- Su alto contenido de fenoles fortalece y estimula la producción de colágeno y elastina, ideales para la prevención de las arrugas.
¿Cómo preparar el té blanco?
Es una bebida muy fácil de preparar y lo mejor es que se puede hacer a partir de las hojas secas de la planta en vez de usar los sobres listos para hacer la infusión
- Se tiene que poner a hervir una taza de agua, apagar y dejar reposar 2 minutos (si se usa el agua hirviendo se estropeará el sabor).
- En una tetera poner unas hojas sueltas de té blanco (una cucharada sopera).
- Agregar el agua caliente encima, tapar y dejar reposar entre 5 y 8 minutos.
- Por último, colar antes de tomar (se le puede poner un poco de limón).
